El control del accionariado
“Estamos en una fase de reflexión, todavía no se ha tomado ninguna decisión”, subraya el ejecutivo. Pero sobre esa reflexión, despliega las posibilidades que tiene la compañía. “Una sería abrir el capital, y eso podría significar un accionista de capital riesgo; podría significar un accionista a mucho mayor largo plazo, o podría significar el mercado”, dice Puig. Siempre bajo la premisa de que la familia seguiría controlando la compañía, como los casos d Hermès o Prada, empresas que salieron al parqué pero cuyas familias fundadoras siguieron al frente de las mismas.»