El economista es un profesional llamado a introducir racionalidad en la toma de decisiones y a contribuir al bienestar de la sociedad.
La mejor defensa de la profesión es conseguir el reconocimiento por parte de la sociedad de la función social del economista.
Existe una organización colegial regida por normas explícitamente declaradas como estatutos, reglamentos, directrices etc. , y que en general nos representa ante la sociedad y en particular a través de las Juntas de Gobierno en las justas reclamaciones y negociaciones motivadas por diferencias que surjan con ocasión de nuestro ejercicio profesional.